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Inductores proteicos contra enfermedades en chile y tomate

Los inductores de resistencia previenen que las enfermedades bacterianas en tomate (Solanum lycopersicum) y chile (Capsicum annuum) provoquen pérdidas de productividad.

Un grupo de especialistas del Centro de Investigación y Asistencia en Tecnología y Diseño del Estado de Jalisco, México, revisó la efectividad de un inductor biológico elaborado con proteínas Harpin (Hrp). Durante el ensayo, evaluaron el control de la mancha bacteriana en tomate, ocasionada por Pseudomonas syringae pv. tomato, y en chile, por  Xanthomonas euvesicatoria.

Las proteínas Harpin son moléculas producidas por ciertas bacterias fitopatógenas. En este caso, de Pseudomonas syringae y Xanthomonas spp. Estas proteínas funcionan como factores de virulencia en las bacterias, pero también pueden inducir respuestas de defensa en las plantas.

Las proteínas Harpin activan la respuesta inmune de las plantas y refuerzan sus mecanismos de defensa contra patógenos.

50 % menos daños

Las plantas fueron asperjadas con el inductor de proteínas Harpin, con dosis de hasta 3 mililitros por planta 24 horas antes de la infección. Los síntomas fueron evaluados tras 30 días mediante el conteo de manchas en el tejido foliar.

Los resultados mostraron que el inductor redujo el daño en tomate y chile. En tomate, la aplicación previno la aparición de manchas en 53 %. Por otro lado, en chile, el tratamiento logró una reducción de 60 %.

Los investigadores señalan que estos hallazgos respaldan el potencial de los inductores proteicos Harpin como una solución efectiva para el control de enfermedades bacterianas hortalizas.

Fuente: Revista Mexicana de Fitopatología