Adrián Angulo Bojórquez
Ingeniero agrónomo
Asesor independiente
- La solarización es indispensable para contrarrestar las enfermedades y plagas del suelo
- Es necesario que la planta esté nutrida con micro y macroelementos
- El manejo desde la plántula con microorganismos benéficos como Bacillus, Trichoderma o micorrizas es útil
La alta densidad de las plantas manejadas en las hortalizas, los nutrientes utilizados para mantener al máximo los niveles productivos y el mal uso del agua de riego son factores que facilitan el establecimiento y diseminación de plagas yenfermedades.
Otro elemento que propicia enfermedades en las plantas es el empleo de variedades altamente productivas, pero con poca tolerancia o resistencia a patógenos.
Para controlar un problema agronómico es necesario conocer el manejo del suelo, plántulas, plagas, hongos entomopatógenos, depredadores, parasitoides, enfermedades, antagonistas y plaguicidas. Si no se conoce el problema, no se puede aplicar una solución adecuada.
1. Manejo de plántulas
Las semillas se pueden tratar con microorganismos benéficos como Bacillus subtilis, Trichoderma harzianum y micorrizas antes de ser sembradas, o después se pueden asperjar mediante una solución y aplicar estos microorganismos con un riego.
Las aplicaciones de fertilizantes se realizan desde que la planta presenta la primera hoja verdadera bien formada; estas aplicaciones deben ser a base de derivados de fermentos de vegetales y animales, productos biológicos o minerales naturales.
Las aplicaciones a las plántulas para el control de insectos y enfermedades deben efectuarse cada dos días con dosis bajas de productos naturales o derivados de microorganismos benéficos. Es recomendable la colocación de trampas dentro del semillero para monitorear y capturar insectos.
Una adecuada temperatura es necesaria para que la planta conserve su potencial genético, aspecto que debe tomarse muy en cuenta por el agrónomo.
2. ¿Cómo aplicar composta?
La composta debe aplicarse 90 días antes del planteo, aproximadamente. La dosis dependerá del cultivo a establecer, de los nutrientes y microorganismos que tenga el suelo. Por ello, hay que realizar un análisis de este para conocer la cantidad de nutrientes y la diversidad biológica existentes en el área a plantar.
En términos generales, la dosis es de cuatro toneladas para tomate, pepino, calabaza; en berenjena y chiles, hasta 10 toneladas.
3. Solarización
La solarización es una herramienta indispensable para contrarrestar las plagas y patógenos del suelo, siempre y cuando la temperatura suba por encima de los 50 grados centígrados por al menos tres días y la humedad del suelo esté arriba del 60 %.
En algunas partes una temperatura alta puede distorsionar los goteros de la cintilla cuando es colocada y se solariza; por lo tanto, es conveniente solarizar y después colocar la cintilla.
El artículo completo está disponible en el número 33, páginas 2 a 5, de su revista Agro Excelencia