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Mejora la fertilidad del suelo transfiriendo nitrógeno del aire al suelo
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Reportan aumento de 30 % en el rendimiento de los cultivos
A medida de que el cambio climático empeora, los agricultores buscan protegerse contra la sequía, conservar el agua, mejorar la fertilidad del suelo y evitar un mundo 4 ºC más cálido.
La producción de alimentos debe duplicarse para 2050 para prevenir una hambruna generalizada, incluso cuando el cambio climático amenaza con disminuir el rendimiento de los cultivos hasta en un 50 %.
Proponen uso de árboles de acacia
Resultado de una investigación en África, proponen la integración de árboles en los sistemas de cultivo. La práctica actualmente está ayudando a millones de pequeños agricultores de este continente a protegerse contra la sequía y el hambre.
Al mismo tiempo, el sistema reduce las emisiones de gases de efecto invernadero, conserva el agua y mejora la fertilidad del suelo.
Los resultados más prometedores provienen de la integración de árboles de Faidherbia albida, una acacia indígena africana, con cultivos alimentarios. Estos árboles mejoran la fertilidad del suelo extrayendo nitrógeno del aire y transfiriéndolo a través de sus raíces y hojarasca.
A diferencia de la mayoría de los árboles, F. albida arroja sus hojas ricas en nitrógeno durante el comienzo de la temporada de lluvias.
Compatible con cultivos agrícolas
Esto la hace altamente compatible con los cultivos alimentarios porque no compite con ellos por la luz, los nutrientes o el agua durante la temporada de crecimiento.
Las hojas vuelven a crecer cuando comienza la estación seca, después de que se han cosechado los cultivos.
Los agricultores africanos que han adoptado esta técnica están cosechando resultados impresionantes sin el uso de fertilizantes costosos. Los rendimientos de los cultivos a menudo aumentan en 30 % y, a veces, más.
En Zambia, por ejemplo, el rendimiento del maíz se triplicó cuando se cultivó bajo árboles de Faidherbia albida.
Acciones contra el cambio climático
Además de aumentar la productividad y los ingresos de los agricultores, esta práctica tiene otros beneficios, como los siguientes:
- Aumenta la eficiencia del uso del agua de lluvia hasta en un 380 %
- Captura y almacena hasta 4 toneladas de carbono por hectárea al año
- Reduce hasta 3.5 toneladas de emisiones de dióxido de carbono (CO2) equivalente por hectárea al año.
En el contexto del cambio climático, el aumento de la población mundial, la reducción de la propiedad de la tierra y la disminución de la productividad del suelo, esta técnica es una solución eficaz para los desafíos agrícolas complejos y una forma asequible de lograr mayor productividad, ingresos y seguridad alimentaria; resiliencia mejorada; y una mayor mitigación del cambio climático.
Esta investigación fue realizada por el Centro Mundial de Agrosilvicultura, miembro del Grupo Consultivo sobre Investigación Agrícola Internacional (CGIAR), un consorcio de 15 centros de investigación respaldados por el Banco Mundial.
Fuente: Banco Mundial