La marchitez del chile, causada por el hongo Fusarium oxysporum, es una de las enfermedades más agresivas que afectan al cultivo de chile jalapeño, al ocasionar pérdidas de hasta 40 %, según especialistas del Colegio de Postgraduados. Esta enfermedad daña las raíces y tallos, dificultando el desarrollo de las plantas.
Frente a este problema, investigadores de la Universidad Autónoma de Chihuahua evaluaron el uso de bacterias del género Bacillus como una alternativa biorracional para el manejo de este hongo.
Menor severidad de la enfermedad
Los especialistas emplearon dos cepas nativas de Bacillus cereus (Bc28-2 y Bc28-5) y una de Bacillus thuringiensis (Bt24). Además, se utilizó como referencia comercial una cepa de Bacillus subtilis.
Las pruebas ocurrieron en laboratorio y en invernaderos en una zona productora en Delicias, Chihuahua, México, utilizando plántulas de chile jalapeño. Evaluaron la capacidad de estas bacterias para inhibir al hongo y su efecto en el desarrollo del cultivo.
Las seis cepas de F. oxysporum utilizadas en el estudio fueron altamente patógenas, con una incidencia de 100 % y una severidad cercana a 90 %. Sin embargo, Bacillus cereus Bc28-2 y Bc28-5 redujeron la severidad de la enfermedad en 60 %, además de mejorar el desarrollo de las plántulas, con tallos más gruesos y raíces más largas. Estas cepas incluso se acercaron al rendimiento del control comercial.
Por otro lado, aunque B. thuringiensis Bt24 favoreció el crecimiento del chile, fue ineficaz para controlar la marchitez.
Opción contra la marchitez de chile
Tras estos resultados, los investigadores concluyen que las cepas nativas de B. cereus podrían integrarse en estrategias de manejo para el cultivo de chile.
La investigación refuerza la necesidad de continuar evaluando herramientas para enfrentar enfermedades en los cultivos, reduciendo el uso de agroquímicos y optando por tecnologías basadas en microorganismos benéficos.
Fuente: Revista Mexicana de Fitopatología