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El rendimiento de la producción está ligada a la calidad de un suelo
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Los análisis de fisicoquímicos y microbiológicos son una herramienta para un buen manejo de suelo
El crecimiento y desarrollo de los cultivos y la cantidad y calidad de las cosechas están estrechamente ligadas a la disponibilidad de los nutrientes en el suelo y a la actividad de los microorganismos que intervienen en el reciclaje, fijación y movilización de los nutrientes.
El rendimiento es mermado cuando se carecen de las cantidades adecuadas de nutrientes en el suelo y sus condiciones fisicoquímicas del suelo obstruyen su movilidad para ser tomados por las plantas.
Esto puede ocurrir por la ausencia de los microorganismos responsables de hacer biodisponibles estos nutrientes o por los desbalances en la biodiversidad que conducen al cultivo a la enfermedad.
Esto hace necesaria la incorporación de enmiendas para suplir dichas necesidades y corregir las condiciones adversas.
¿Cómo saber qué necesita un suelo?
Los análisis fisicoquímicos y microbiológicos del suelo son la base para determinar las necesidades de un suelo y suministra la información necesaria para cubrirlas.
Dichos análisis permiten saber si en el suelo habitan las poblaciones microbiológicas que permiten llevar a cabo las funciones bioquímicas y fisiológicas necesarias para que esos nutrientes sean aprovechables por los cultivos (características microbiológicas).
En concreto, los análisis fisicoquímicos y microbiológicos del suelo permiten al productor agrícola predecir sus rendimientos, corregir y prevenir los problemas que limitan el rendimiento y potenciar la efectividad de las estrategias tecnológicas de producción, como el uso de fertilizantes, enmiendas orgánicas, mejoradores de suelos y microorganismos benéficos.
¿Qué otra información se obtiene a través del análisis?
El pH del suelo y su efecto sobre la disponibilidad de nutrientes es información de interés para el productor que se obtiene con dichos análisis. Otros son la clasificación del suelo a través de su constitución, su capacidad de intercambio catiónico y el contenido de materia orgánica y de micro y macronutrientes.
Esta información pueda ser usada para un mejor manejo del suelo y el cultivo. Es el punto de partida para la toma de decisiones en cuanto a la adición de fertilizantes.
Microbiología del suelo
En el suelo existen poblaciones funcionales, como fijadores de nitrógeno, solubilizadores de fosfatos y de potasio. También hay microorganismos que promueven el crecimiento vegetal y antagonistas que permiten controlar a las poblaciones de fitopatógenos.
El análisis microbiológico del suelo permite aislar a estos grupos funcionales y utilizarlos para potenciar el rendimiento de sus tierras de una forma ecológica y con fines de preservación. De esta manera se promueve conservar la identidad biológica y la capacidad de los suelos para generaciones futuras, de acuerdo con el Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias.
Fuente: Inifap